Has encontrado a alguien especial con quien disfrutar de todas las actividades en pareja (San Valentín, etc.). Pero ahora también vas a dar el siguiente paso: vas a conocer por primera vez a la familia política o a la familia de tu pareja.

Las parejas suelen presentarse a sus “suegros” en esta época del año, y los preparativos pueden ser muy angustiosos. Nadie lleva a casa acualquiera para que conozca a su familia, y el estrés de tener que causar una buena primera impresión puede complicar mucho las cosas.

Aquí tienes algunos consejos para no complicarte la vida y dejar boquiabierta a la familia de tu pareja.

Reúna información de antemano

  • ¿Hay algún tema específico que deba evitar a toda costa?
  • ¿Cuál es la dinámica familiar: juguetona, bromista, estricta, etc.?
  • ¿Hay algo en particular que deba saber sobre tu familia?
  • ¿Hay alguna tradición o norma que deba tener en cuenta?

Pregunte incluso por miembros concretos de la familia. Hacer estas preguntas a tu pareja antes de conocer a los suegros te prepara para el entorno en el que te vas a mover (y tu pareja también apreciará que te preocupes lo suficiente como para preguntar). Aunque definitivamente no debe cambiar para adaptarse a la dinámica, esto le dará tiempo para prepararse y calmar los nervios.

Lleve un regalo

No hace falta que derroches en vajilla cara, pero un pequeño regalo o una contribución en forma de comida te ayudará sin duda a caerles en gracia. Demuestra que has pensado en la familia antes de venir y que te importa desvivirte por ellos.

Si decides cocinar algo, pregunta a tu pareja si tiene alergias y a cuántas personas debe servir. Si preparas una pequeña guarnición o un postre, demostrarás tus dotes culinarias sin quitar protagonismo al anfitrión.

Colabora

Ofrécete para ayudar a preparar la cena, poner la mesa, recogerla, etc. Las cenas navideñas requieren mucho trabajo y, si colaboras, estrecharás lazos con su familia y les demostrarás que eres una persona educada y trabajadora También es una buena forma de ganarte un momento de silencio cuando la conversación empiece a agotarse.

Deja el teléfono

Todos lo sabemos: no hay nada peor que mantener una conversación con alguien que no para de mirar el móvil. Siléncialo, guárdalo en el bolso y céntrate en intentar entablar conversación y conexiones con la familia de tu pareja Aunque los demás se mantengan conectados, permanecer presente con la gente de allí te ayudará a destacar.

Preguntas por doquier

La familia de tu pareja querrá saber todo lo que pueda sobre ti, y eso está muy bien. Responde a las preguntas lo más abiertamente posible y deja que te conozcan. Si eres un jamón, no tengas miedo de hacer bromas y provocar algunas risas.

Sin embargo, recuerda hacerles preguntas. No demasiado indiscretas, pero sí lo suficiente como para demostrar que te interesa conocerles: querrás demostrar que estás atento y comprometido. Puedes preguntarle sobre su infancia, cómo se conocieron sus padres o cómo pasan el tiempo libre. Demostrar que no sólo te preocupas por ti te ayudará a ganar puntos.

No te esfuerces demasiado

El último consejo, y el más importante, es dejar que tu personalidad, tus valores y tuyo brillen con luz propia. Sigue los consejos anteriores, pero sólo en la medida en que sigas sintiéndote tú misma Tu pareja te eligió por cómo eres, y es a ti a quien quiere que conozca su familia.

Tómate un momento para ponerte en contacto con tus pensamientos antes de llegar y disfruta conociendo a los suegros, ¡algunas de las personas más importantes en la vida de tu pareja! Vas a estar genial.